¿POR QUÉ ME FALTA EL ALIENTO REPENTINAMENTE?
Al tener EPOC, puede encontrarse con una falta de aliento repentina durante sus actividades diarias. Esto sucede cuando su cuerpo necesita más oxígeno del que ya está respirando, puesto que le toma más tiempo vaciar los pulmones dado que el flujo de aire es más lento. Esto puede hacer que respirar resulte incómodo y provocar una inesperada falta de aliento, lo que aumentará sus niveles de estrés como consecuencia.
Asegúrese de comentar su repentina falta de aliento con su proveedor sanitario, para ayudarle a determinar la causa de sus síntomas y recetarle el medicamento adecuado.
Este módulo informativo contendrá 3 partes principales con consejos concretos sobre cómo gestionar una falta de aire repentina que puede producirse en público.
1 – Técnicas para reducir el estrés
- Tenga en cuenta que la falta de aliento pasará y no le causará ningún daño físico potencial. En su lugar, trate de mantener una mentalidad positiva y concéntrese en su respiración.
- Si es necesario, anote sus preocupaciones. No dude en hablar con alguien, por ejemplo, llame a un familiar o amigo para que lo tranquilice.
- Utilice la técnica de los 5 sentidos para la ansiedad, de modo que pueda desviar su atención del estrés. Esta técnica consiste en nombrar:
- 5 cosas que puede ver
- 4 cosas que puede tocar
- 3 cosas que puede oír
- 2 cosas que puede oler
- 1 cosa que puede saborear
2 – Técnicas de posicionamiento
- Póngase de pie o siéntese, si tiene una silla o un banco cerca, inclínese hacia delante.
- Apóyese en una pared, con las rodillas ligeramente flexionadas y relaje los brazos.
3 – Emplee técnicas de respiración correctas
- La técnica del labio fruncido:
- Paso 1: inspire suavemente por la nariz.
- Paso 2: frunza los labios como si fuera a apagar una vela o a silbar.
- Paso 3: exhale lentamente, solo durante el tiempo que le resulte cómodo.
- Técnica de respiración rectangular: inspire durante 2 segundos y espire durante 3 segundos. Consejo: mire cualquier objeto con forma de rectángulo, como el teléfono o un libro.
Para estas dos técnicas, puede cerrar los ojos para concentrarse en la respiración.
- Utilice un ventilador de mano, abra cualquier ventana que tenga cerca o simplemente salga al exterior para tomar aire fresco.